Publicación de Tiempo de silencio
Luis Martín-Santos quería publicar su novela. Al ser el editor Carlos Barral amigo suyo, pensó que él podría llevarlo a cabo. Con motivo de las actividades de la Asociación Artística de Guipúzcoa, le invitaron para dar una conferencia sobre el tema La poesía española en los últimos veinte años; aprovechó este contacto con Carlos Barral para proponerle la publicación. El psiquiatra y amigo de Martín-Santos Juan José Lasa recuerda cómo Luis, finalizada la conferencia, invitó a cenar a su casa a Carlos Barral, José María Castellet que había venido para hablar de la novela de los últimos años, Enrique Múgica, Joaquín Pradera, Vicente Urcola ya él mismo con sus respectivas esposas (22).
Meses más tarde, fue el Dr. Munoa quien llevó el original a Carlos Barral para ser publicado. Recuerda que Martín-Santos, cuando le entre gó el manuscrito, le dijo: Dale esto a Carlos. Uno tiene la impresión, cuando hace el primer libro, de que la obra es completa, que se ha transmitido casi todo el mensaje y que uno se queda con muy pocos elementos residuales. Te llevas todo lo mío, casi todo lo mío. ¿Será suficiente lo que queda para hacer algo más? (23).
La censura eliminó una buena parte del texto y algún fragmento esencial de esta primera edición, según relata Juan Benet: Entre los diversos dogmas literarios que Luis se había dictado a sí mismo, uno consistía en creer que toda obra literaria de envergadura debía incluir, ya poder ser en su parte central, una "Walpurgisnacht". No será de extrañar, por consiguiente, que ésta asome en la parte central de "Tiempo de silencio" en forma de dos escenas, de unas veinte páginas de longitud en total, que la censura tuvo a bien suprimir en la edición de 1962. Tal importancia concedía Luis a esas páginas (pues sin ellas la novela carecía de Walpurgisnacht) que, cuando me envió el libro, lo acompañó de sus copias al carbón, con indicaciones precisas sobre los puntos donde debían ser intercalados los diversos párrafos. Las escenas se desarrollaban en el burdel de doña Luisa, en obediencia al canon impuesto por Mabbot Street (24).
Estos párrafos, a pesar de ser esenciales, no son los únicos suprimidos por la censura, sino que son bastantes más. Ronald F. Rampin hace un estudio en el que compara la primera edición de Tiempo de silencio, de 1962, la octava edición de 1971, la decimoséptima edición de 1981, publicada como edición definitiva, y la versión inglesa de la novela Time of Silence, traducida por George Lesson y publicada en 1964. En este estudio se observa que la edición del 62 está muy mutilada, la edición inglesa de 196.4 es mucho más completa, pero es superada ampliamente por la edición españ.ola de 1971, cuyas diferencias con respecto a la edición definitiva del 81 son mínimas (25).
*Notas
(22.) LASA ALBAITERO, 1.1., "Testimonio personal", San Sebastián, 28-4-87, Apéndice N. 49 y MUNOA ROIZ, 1.L., "Testimonio personal", San Sebastián, 27-3-87, Apéndice N. 68.
(23.) MUNOA ROIZ, J.L., op. cit.
(24.) BENET, J., Otoño en Madrid hacia 1950, Madrid, Alianza Ed., 1987, p. 123.
(25.) RAMPIN RONALD, F., "The phantom pages of Luis Martín-Santos "iempo de Silencio". Neophilologus, Groningen (Holanda), Vol. LXXI, N. 2, (1987), pp. 235-243.